Nos preguntamos por que no se apoya la exposición histórica permanente en la ETEA.
No se entiende, ni se comprende en los años de gestiones realizadas y peticiones formuladas con el fin de poder disponer del espacio ya existente poder visionar el capital histórico, en cuanto a objetos se refiere Y en su emplazamiento natural, que sin duda se entiende, debería ser la ETEA, por tener el espacio necesario y su ubicación perfecta.
Siempre hemos manifestado y expuesto, que su situación mas idónea por sus cualidades, situación etc. debería ser la antigua enfermería, lugar adecuado e idóneo por sus dimensiones para la capacidad de la exposición, con la situación a pie de calle.
Es una lástima que la historia de algo tan importante como fue una Escuela única en su género de nivel internacional sea historia olvidada y peor aún desconocida en la ciudad donde fue creada, aunque en manos está en alguna Institución, para poder remediarlo y ser recuperada, recordando tan importante centro que tuvo sus inicios a bordo del crucero Navarra en el puerto de Vigo y posterior traslado a tierra en la Base Naval de Ríos, terminando su historia como tal, en el año 2002.
Se consiguió que los colectivos de la zona donde está ubicada la ETEA (Teis-Vigo) apoyen la iniciativa, al igual que mas de 1.300 firmas en el mismo sentido así como Instituciones locales y nacionales.
Es evidente que la historia no debería olvidarse nunca ya que de ella se forja el futuro y en este caso el ejemplo ya se vio con la gran aportación que tuvo a nuestras empresas de los excelentes y cualificados alumnos formados en la ETEA en sus diversas especialidades, que luego alcanzarían muchos de ellos importantes puestos laborales siendo personas altamente cualificadas y demandadas para aéreas de electricidad y electrónica, aplicadas a la industria naval e industrial, entre otras.
Cuando visitan de todas las latitudes de España a las antiguas instalaciones de la ETEA y concretamente a nuestra sede social los que allí se formaron preguntan donde se llevaron los objetos que aquí estaban, ¡que pena por no estar expuestos aquí mismo!, los recuerdos afloran, por ello insistimos es necesario unir los esfuerzos donde solo falta la ubicación y su rehabilitación. En nuestras manos no estácy sería quizá una perdida imperdonable no exponerla permanentemente en su lugar natural.
Seguiremos preguntándonos cuanto tiempo se necesita para poder ver hecha realidad esta exposición, quizá por que no interesa recuperar la historia de la ETEA.
Esperamos que alguien con poder de decisión nos escuche y podamos mostrarle a todos los que nos visiten la historia que no deberíamos olvidar y que futuras generaciones agradecerán.